También denominados diferenciales Ferguson. Son muy utilizados como diferenciales centrales en vehículos con tracción a las 4 ruedas.
En este tipo de diferencial la barra de transmisión de cada uno de los ejes está unida a un juego de discos especiales intercalados dentro de una carcasa hermética que contiene un fluido de gran viscosidad (normalmente silicona). Cuando hay diferencia de giro entre el eje delantero y trasero, los discos de ambos ejes también empiezan a girar con idéntica diferencia de velocidad. Dotados de hendiduras y taladros, a través de los cuales puede pasar el aceite silicona (mezclado con un 20% de aire), este, por la fricción, se vuelve más viscoso, genera calor y tiende a hacer solidarios los dos juegos de discos, igualando sus velocidades de giro y pudiendo transmitir hasta el cien por cien de la fuerza al eje con mayor adherencia.