Un filtro de partículas diésel, también denominado DPF, es un dispositivo diseñado para eliminar la materia particulada diésel (partículas sólidas) del humo de un motor diésel, la mayoría de los cuales están catalogados como de una eficiencia del 85%, pero frecuentemente obtienen eficiencias por encima del 90%. Un vehículo propulsado por diésel, con un filtro de este tipo instalado, no emitirá humo visible por su tubo de escape.